¿Se imaginan ustedes lo que ocurriría si los españoles, todos, empezáramos a manifestarnos contra cualquier circunstancia pretérita que nos siga pareciendo indignante? Podríamos salir a la calle para protestar contra el GAL del señor González, contra el golpe de Tejero, contra los cuarenta años de dictadura, contra la guerra civil, contra la quema de conventos,
La Ley de Igualdad
Ni que decir tiene que la flamante Ley de Igualdad ha venido a colmar todas mis aspiraciones feministas. Ventajas de la era zapatera. Ahora sí que en España los hombres y las mujeres o, mejor dicho, las mujeres y los hombres (las damas, primero) vamos a hacer carrera al margen del encaje que tengamos, la
Delibes
Es rara la entrevista a Delibes que publicaba el lunes este periódico. Rara, curiosamente, en las distintas acepciones del término, y a un tiempo extraordinaria, escasa en su especie, insigne, ligeramente extravagante y hasta etérea, de puro inconsistente. No me refiero a las preguntas, sino a las respuestas. Leyéndolas, uno diría que para este escritor
Todos a la calle
Si yo fuera un preso común, no tardaría ni dos horas en declararme en huelga de hambre. Trataría enseguida, por supuesto, de hacer pública mi situación. Y explicaría que no pienso abandonarla hasta conseguir un tercer grado o algo que alegremente se le parezca. Intentaría convencer a mis compañeros de celda para que, en el
Tip y Coll
Se ha muerto José Luis Coll, que era la otra mitad de la historia de un vaso. Primero se nos fue Tip, ese lúcido loco de derechas que a los señores con bigote los llamaba «buena mujer» y a mí, cuando tuve la suerte de conocerle, me felicitó por estar ya hecha un hombre. Y
Hambre de justicia
Me imagino que De Juana, tras 115 días sin probar otra cosa que el suero obligatorio, más algún tentempié de contrabando, ya sabrá lo que es pasar hambre. Habrá experimentado durante muchas horas – largas como un desfile de minutos eternos como un bucle de calvarios – esa sensación que uno tiene, cuando no se
El centro y la diana
Ya nos dijo un poeta, me parece, que «ser de centro es como no ser nada». Ésta es una idea bastante extendida entre las personas que viven para, por y de una ideología. En su visión de las cosas, el mundo se divide en dos mitades: ellos, con su razón de vence y suma, y
Romance de la suerte esquiva
A nuestro buen Zapatero se le ha acabado la chamba: desde la fina advertencia que le hicieron en Barajas los gentiles batasunos y los valientes etarras (unos poniendo la bomba, y otros poniendo la cara) para explicarle hasta dónde deben llegar las palabras, el pobre está que tropieza, el pobre está que resbala, y no
Los Carnavales
Me he venido a Tenerife a disfrutar los Carnavales por no sufrirlos en Bruselas ejerciendo a la vez, como si eso fuera posible, de madre y trabajadora. Por allí todavía se celebra esa cosa tan alpina de la semana blanca, consistente en que los colegios se toman un respiro so pretexto, te cuentan, de que
La Ínsula Tabacaria
Como dicen en mi tierra, y recordando a Paco Rabal en su papel bordado de ex torero, he dejado el «jodío fumeque». Para no tener luego que rebobinar la cinta y ahorrarme esa cara de fundido en negro que se le puso a nuestro presidente del Gobierno tras el atentado de Barajas -cuando la ETA,