Cada vez que, por junio, llega a España el verano, se me llena la boca de círculos antiguos, y el crepúsculo rosa, de un amargo recuerdo, que tiene, de imborrable, que al menos es más dulce que el olvido. Y voy del desamparo a las cerezas, porque todas las cosas en que he estado metida,
El cerebro
No paran, los científicos, de confirmarnos lo que ya sospechábamos. Dicen ahora los investigadores suecos, que no siempre hacen honor a su fama, que la tendencia sexual tiene una traducción en la conformación del cerebro, o, más propiamente, que la estructura del cerebro determina las inclinaciones sexuales. Yo tengo que confesarles que, aun agradeciendo a
El fistro
Hay que reconocer que la ministra 2.0 está haciendo ruido. Tiene un apellido sonoro, que nos traería remembranzas de la Aída de Verdi si no fuera porque el personaje, visto lo visto, encajaría mejor en la muy popular serie homónima. Para ser tan pequeña, es insaciable. No contenta con su teléfono del desahogo, al que
El diario
Pocas cosas envejecen antes que un periódico. Como las moscas de mayo, que nacen, se reproducen y mueren en horas, o como esas efémeridas de su pulso de que hablara Cervantes, que a más tardar, nos dice, «acabarán su carrera este domingo», las páginas de un diario se vuelven inservibles, se ponen amarillas con cada
El maná
Ha dicho el ministro Solbes, que cada vez se parece más a uno de los siete enanitos, que con la deducción de los cuatrocientos euros no hay margen para más planes «estrella» en la galaxia. O sea, que ni «Vive» ni deja vivir. Las arcas del Estado, otrora tan rumbosas, ya no están para fiestas
Los chats
Antiguamente, chatear era irse de chatos. Desde que Internet se coló en nuestras vidas, ya no hace falta bajar a la taberna de la plaza para intercambiar anécdotas, opiniones y cotilleos, ese ruidoso muro de palabras que alzamos frente a la soledad, o, más bárbaramente, insultos, sarcasmos y amenazas, o sea, los agrazones de nuestra
La crisis
¿Por qué será que todo en la vida avanza y retrocede, igual que las parejas en un baile romántico? Llegan años de azúcar y bonanza, la gente se ilusiona, prospera, planifica, invierte, compra, arregla, modifica, y esa fiebre dorada se contagia a otra gente. Y de pronto, con o sin previo aviso, sube el petróleo
La guerra de los chefs
Ya ven la que se ha liado con el libro de Santi Santamaría y sus críticas a la «nouvelle cuisine» española. La guerra de los chefs no para de producir titulares y, como se descuiden los del PP, va a dejar convertida la polémica sobre la definición y el liderazgo del partido en agua de
El espectáculo
A Mariano Rajoy lo están poniendo algunos pesos pesados de su partido de chupa de dómine, y hasta directamente contra las cuerdas. No sé qué le reprochan. Quizás que no sea Aznar, pero a Aznar lo tenían vivito y coleando, y ya ven que se fue, aunque sólo un poquito. O mandas o no mandas.
Las mosca cojonera
Dice la ministra de Igualdad, entrevistada recientemente, que quiere ser y será la mosca cojonera del gobierno, aunque añade que no le gusta esa expresión. Es lógico que no le guste, porque, a tenor del lugar por el que la susodicha (me refiero a la mosca) tiende a merodear, no parece en exceso igualitaria. Esta